Uso de fluoruros para prevenir caries de la infancia temprana (CIT)
Hábitos bucales no fisiológicos y su manejo odontológico
AUTOR: Dayanira L. Hernández Nava / Carlos A. Hernández Pérez
Resumen
Los hábitos bucales son comportamientos que pueden ser normales en un determinado momento de nuestra vida, pero su persistencia con el tiempo nos puede conducir al desarrollo de alteraciones oclusales o esqueléticas, estados musculares alterados o algún tipo de maloclusión, afectando el desarrollo normal del sistema estomatognático.
Para lograr un tratamiento exitoso se deben considerar todos los elementos que producen cada uno de los hábitos. Suspender un hábito no funcional requiere de la cooperación del paciente y su madurez para entender las consecuencias de un hábito persistente. El propósito del presente artículo es mencionar los aspectos más importantes sobre los hábitos bucales e identificar los más frecuentes, haciendo énfasis en sus características y las opciones de tratamiento para cada uno de ellos.
Palabras clave: hábitos bucales, succión digital, onicofagia, deglución atípica, respiración bucal
• Abstract
Oral habits are behaviors that can be normal at a certain moment in our lives, but their persistence over time can lead us to the development of occlusal or skeletal alterations, altered muscular states, or some type of malocclusion, affecting the normal development of the stomatognathic system.
To achieve successful treatment, all the elements that produce each of the habits must be considered. Stopping a non-functional habit requires the patient’s cooperation and maturity to understand the consequences of a persistent habit.
This article aims to mention the most important aspects of oral habits and identify the most frequent ones, emphasizing their characteristics and treatment options for each of them.
Keywords: oral habits, finger sucking, onychophagia, atypical swallowing, mouth breathing
• Introducción
Un hábito es una costumbre adquirida por la repetición frecuente de un mismo acto que puede generar satisfacción. Existen hábitos bucales fisiológicos como son la respiración nasal, la masticación, el habla y la deglución; por otro lado, también existen hábitos bucales no fisiológicos, los cuales generalmente están precedidos por adaptaciones intraorales inadecuadas, resultando en alteraciones oclusales o esqueléticas, estados musculares alterados o en algún tipo de maloclusión, afectando el desarrollo normal del sistema estomatognático.1,2
Existen otros factores de carácter exógeno asociados con los hábitos bucales no fisiológicos, entre los cuales podemos destacar procesos psicológicos como la sobreprotección, ausencias familiares, ansiedad, nerviosismo; antecedentes alimenticios como ausencia o restricción de la succión materna, persistencia de dieta de fácil masticación, etc.3
Entre los hábitos bucales no fisiológicos podemos encontrar la succión digital, deglución atípica, respiración bucal, interposición de labio, onicofagia o mordedura de objetos, siendo estos considerados los más frecuentes.1
• Elementos asociados con la complejidad de los hábitos
Los hábitos bucales no fisiológicos pueden presentar variables que los hacen diferentes unos de
otros.
• Intensidad. Es la potencia o fuerza con la que se llevan a cabo los hábitos. Se clasifica en una intensidad fuerte o débil. Una intensidad fuerte va acompañada de ruido durante la ejecución del hábito, mientras que una intensidad débil se caracteriza por ausencia de ruido.
• Frecuencia. Es la medida del número de veces en las que se realiza el hábito durante el día, tomando en cuenta los ciclos del día, mañana, tarde o noche.
• Tiempo. Mide la duración de los hábitos considerando las unidades de tiempo, como pueden ser segundos, minutos u horas.
• Edad. Nos indica el momento en el que se presentan los hábitos, lo cual será de gran importancia para identificar el progreso de su desarrollo.3
Hábitos orales
Hábito de succión digital
La succión digital es una de las primeras formas de conducta específica en el feto, estimulada por olores, sabores y cambios de temperatura (fig. 1). 4
Existen dos formas de succión: la nutritiva y la no nutritiva; ambas provocan sensación de calidez y
seguridad. La succión no nutritiva hace referencia a la succión de dedos, chupones y otros elementos no relacionados con la ingesta de nutrientes, los cuales son considerados como una actividad normal en el desarrollo fetal y neonatal hasta los 18 meses de vida; después de este tiempo se pueden presentar consecuencias nocivas.1,5
En este hábito se posiciona el pulgar u otros dedos dentro de la boca muchas veces durante el día y la noche, ejerciendo una presión definida al succionar. Puede estar relacionado con estados de ansiedad e inestabilidad emocional.1 Si el hábito de succión persiste más allá del tiempo en que los dientes permanentes comienzan a erupcionar, se puede desarrollar una maloclusión.6
Existen dos tipos de succionadores, el succionador pasivo, el cual tiende a llevarse el dedo a la boca y sólo tenerlo ahí, por lo que este hábito no está asociado con alteraciones craneofaciales; por otro lado, está el succionador activo, en el que se ejerce una presión vigorosa contra la dentición y como consecuencia se producen alteraciones dentales y de la mandíbula.4
El tratamiento debe de estar basado en la edad del paciente; para entender las consecuencias de un hábito persistente, es necesario que sea lo suficientemente maduro. Se pueden realizar tratamientos psicológicos en los cuales será de vital importancia contar con la cooperación de los padres para lograr un tratamiento exitoso. Se les explica los problemas estéticos que ocasiona, sin contar los daños para la salud. Se puede iniciar con terapias simples como recordatorios, en los cuales se les aconseja que se vayan a la cama abrazando algún juguete, ya sea muñeco o peluche, para mantener las manos ocupadas y evitar que se las lleven a la boca. El tratamiento suele consistir en una visita mensual durante 6 meses.
Asimismo, se pueden utilizar técnicas de prevención de respuesta, como la utilización de bandas adhesivas en los dedos o guantes en ambas manos a la hora de dormir. Si dicha terapia no es efectiva, se puede iniciar con aparatología fija.1,4
La trampa de dedo es un dispositivo fijo en el cual se incluye un alambre adaptado de manera pasiva en el paladar formando una obstrucción para el dedo. Su tiempo de uso está indicado por un periodo de 4 a 6 meses (fig.2). 7
Uso de chupones
El uso de chupones obedece a la necesidad de succión, la cual forma parte del funcionamiento saludable y esencial para el desarrollo de la mandíbula y la cavidad oral de acuerdo con la edad del niño. De esta forma, los chupones son un apoyo importante durante este intervalo del desarrollo. Esta necesidad fisiológica de succión es más importante durante los 6 primeros meses de vida; después de esa edad, el uso del chupón tiende a ser un hábito que brinda sensación de seguridad.1
Onicofagia
Se define como el hábito de morderse las uñas. Este es un hábito común y se puede observar tanto en niños como en adultos; se conoce como un hábito de transferencia de la succión del pulgar.1
Es un hábito de tipo autodestructivo y agresivo y se observa con más frecuencia en edades entre los 4 y 6 años. Aunque su causa es difícil de determinar, suele estar relacionado con estados de ansiedad, imitación y estrés (fig. 3).
Clínicamente puede encontrarse apiñamiento, rotación, desgaste, fracturas, protrusión de incisivos superiores, destrucción periodontal de la zona anterior, problemas estomacales, onicomicosis y paroniquia.1
Tratamiento
En casos graves de onicofagia, el tratamiento debe involucrar la eliminación de los factores que induzcan el hábito. El paciente debe ser motivado y ser consciente de la necesidad de abandonarlo.
Es muy importante no castigar, ridiculizar u amenazar, ya que esto puede complicar el problema o reemplazarlo con trastornos psicológicos graves, resultando en conflictos sociales y sentimientos de culpa. Finalmente, se recomiendan actividades al aire libre o actividades con las manos. Un enfoque multidisciplinario debe centrarse en los esfuerzos para contribuir a la autoconfianza y la autoestima del
paciente.1
Deglución atípica
La lengua juega un papel muy importante tanto para la oclusión como para la correcta pronunciación de las palabras. Su tamaño está relacionado con el de la mandíbula y, en cuanto a su posición, la lengua debe estar ubicada entre la bóveda palatina, los arcos dentarios y el piso de la boca.8 La deglución infantil se define como una interposición de la punta de la lengua entre las almohadillas gingivales anteriores y su colaboración en el sello labial.8
La deglución atípica se origina por la interposición de la lengua entre las arcadas dentarias superior e inferior por una inadecuada postura al momento de deglutir. Si persiste la interferencia luego de la erupción de los dientes anteriores se origina una mordida abierta.2,8
Tratamiento
Para tratar la deglución atípica es importante modificar los patrones funcionales de los tejidos orales para la reeducación de la posición lingual.1
Se pueden aplicar ejercicios de terapia miofuncional, como la colocación de una elástica en la punta de la lengua o la utilización de algún distractor lingual, como puede ser la perla de Tucat. Si dicho tratamiento no es efectivo, se puede emplear la utilización de aparatología como la trampa de lengua (fig. 4). 8
La trampa de lengua es un dispositivo que puede ser fijo o removible, consiste en una rejilla conformada de alambre de acero y tiene una disposición vertical con el objetivo de evitar que la lengua se interponga entre las arcadas dentarias superior e inferior. Su tiempo de uso está indicado por un periodo mínimo de 6 meses.1,9
• Respiración bucal
La respiración bucal generalmente se presenta en pacientes en edad de desarrollo. En este hábito, la respiración se realiza a través de la boca, ya que la lengua adopta una posición descendente para permitir la entrada del aire.2,6
Su etiología es multifactorial y puede catalogarse de diferentes maneras, desde una obstrucción anatómica (hipertrofia de amígdalas palatinas, desviación del septum nasal, pólipos, hipertrofia de cornetes) hasta traumatismos nasales, rinitis alérgica o por hábito.
La respiración oral puede conducir a una fuerza labial de cierre debilitada debido a que los labios se mantienen separados rutinariamente y no se ejercitan de forma efectiva los músculos periorales; asimismo, nos puede llevar a una elongación de la altura facial inferior y a la presencia de distintas maloclusiones.1,6
Tratamiento
El tratamiento de la respiración bucal debe emprenderse desde un enfoque multidisciplinario. Es importante realizar una consulta con otorrinolaringología, ya que puede requerir tratamiento quirúrgico si la causa es por una obstrucción nasal (amígdalas, adenoides, pólipos, etcétera). Para tratar problemas de asma, rinitis alérgica y bronquitis, una consulta con un fonoaudiólogo es importante para la enseñanza de una respiración correcta y tratar los problemas del habla.
El tratamiento ortodóncico se emplea para el manejo del hábito y las alteraciones transversales que puedan estar asociadas.1,6 La pantalla vestibular es un aparato indicado en niños para tratar el hábito de la respiración bucal. Está conformada de acrílico y cubre las caras vestibulares de los dientes anteriores y posteriores. Actúa al impedir la entrada del aire por la boca; por lo tanto, se hace de forma obligada por las vías aéreas superiores (fig. 5). 10
Succión de labio
Se define como la interposición labial sobre los bordes incisales de la arcada superior e inferior durante el habla, la deglución o en reposo y generalmente es el labio inferior. El hábito de succión del labio se puede presentar en cualquier edad. Frecuentemente está acompañado de grietas, sequedad, erosión, irritación de uno o de ambos labios o borde bermellón. Por lo general se asocia con una proinclinación de los incisivos superiores y una retroinclinación de los incisivos inferiores.1,2
Tratamiento
Este hábito se puede tratar mediante aparatología ortodóncica con el uso del Lip Bumper o separador labial. Su función es inhibir la presión del músculo orbicular de los labios y del músculo mentoniano. Este dispositivo aumenta la longitud y el ancho del arco y alivia el apiñamiento en el arco inferior. Debe usarse continuamente por un periodo de 10 a 18 meses (fig. 6). 10
• Conclusiones
Los hábitos bucales no fisiológicos pueden conducir al desarrollo de maloclusiones en diferentes etapas de la vida; por eso, es primordial que como cirujanos dentistas seamos capaces de identificarlos tempranamente e intervenir de manera adecuada desde un enfoque multidisciplinario, pues si bien el uso de aparatología ortodóncica es sin duda muy importante, hay que tomar en cuenta que no es el único método que nos permitirá erradicar cada uno de los hábitos bucales y que entre más pronto sean identificados y tratados, menos secuelas dejarán.
Referencias:
- Ocampo A, Johnson N, Lema MC. Hábitos orales comunes: revisión de literatura. Parte I. Rev Nac Odontol Mex. 2014;2357(4607), 1900-3080. Disponible en: https://www.researchgate.net/publication/305286507_Habitos_orales_comunes_revision_de_literatura_Parte_I
- Chamorro F, García C, Mejía E, Viveros E, Llanos L, Triana F, et al. Hábitos orales frecuentes en pacientes del área de Odontopediatría de la Universidad del Valle. Revista CES Odontología. 2016;29(2):4. Disponible en: https://dialnet.unirioja.es/servlet/articulo?codigo=5759180
- Argüello P. Hábitos orales y trígono de fuerzas orofaciales. Editorial Universidad Santiago de Cali, 2020. Disponible en: https://docplayer.es/194178234-Capitulo-2-habitos-orales-y-trigono-de-fuerzas-orofaciales.html
- Solís M. Succión digital: repercusiones y tratamiento. ALOP. 2018;17(1):42-51. Disponible en: http://www.op.spo.com.pe/index.php/odontologiapediatrica/article/view/21
- Lima M, Rodríguez A, García B. Maloclusiones dentarias y su relación con los hábitos bucales lesivos. Rev Cubana Estomatol. 2019;56(2):e1395. Disponible en: http://www.revestomatologia.sld.cu/index.php/est/article/view/1395/1352
- García V, Ustrell J, Sentís J. Evaluación de la maloclusión, alteraciones funcionales y hábitos orales en una población escolar: Tarragona y Barcelona. Av Odontoestomatol. 2011;27(2)75-84. Disponible en: https://scielo.isciii.es/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0213-12852011000200003
- Villavicencio J, Hernández J. Efectividad de la rejilla palatina en el tratamiento del hábito de succión digital en niños. Colombia Médica. 2001;32(3):130-132. Disponible en: http://uvsalud.univalle.edu.co/colombiamedica/index.php/comedica/article/viewFile/197/200
- Jiménez J. Importancia de la deglución atípica en las maloclusiones. Odontología sanmarquina. 2016;19(2):41-44. Disponible en: https://revistasinvestigacion.unmsm.edu.pe/index.php/odont/article/vie w/12917
- Murrieta J, Allendelagua R, Pérez L, Juárez L, Linares C, Meléndez A et al. Prevalencia de hábitos bucales parafuncionales en niños de edad preescolar en Ciudad Nezahualcóyotl, Estado de México. Boletín médico del Hospital Infantil de México.2011;68(1):26-33. Disponible en: http://www.scielo.org.mx/pdf/bmim/v68n1/v68n1a4.pdf
- Modano J. Fuerzas producidas por el Lip Bumper. Acta Odontol. Venez. 2005; 43(1). Disponible en: http://www.odontocat.com/odontocat/nouod2/pdf/article%20cita%20odt%2025.pdf